La juventud del rio vena

Desde mis orillas he observado la evolución de los hombres durante milenios. La vegetación era parecida a la actual, con quercus, encinas, quejigos, aunque la fauna era mucho más variada. En mis orillas he visto leones, tigres, rinocerontes e incluso nadaban hipopótamos por mis aguas.





En mis campas he podido ver La Batalla de Atapuerca una guerra entre hermanos acontecida el 1 de septiembre de 1054 en el valle de Atapuerca entre Fernando I rey de León y Castilla, y su hermano García Sánchez III "El de Nájera", rey de Navarra hijo de Sancho el Mayor. El monarca navarro resultó herido de muerte por un noble castellano, falleciendo en los brazos de San Íñigo. Fernando I se anexionó la comarca para su reino, que era en ese momento territorio navarro. En el mismo campo de batalla se nombró rey de Navarra al hijo del difunto García, Sancho Garcés IV después de haber rendido homenaje a Fernando I.
Tras la batalla, Diego Laínez de Vivar, padre del Cid conquista en 1055, los castillos, entonces navarros, de La Piedra y de Úrbel del Castillo que cerraban el paso a través del valle del alto Urbel.
En agosto se celebran unas jornadas medievales y la representación popular de la batalla de Atapuerca.









Este humilde Rio Vena, solicita desde sus cristalinas agua el homenaje que se merece, Mr.Richard Preece Williams, ingeniero inglés que proyectó el Ferrocarril de la "Vasco-Castellana" y el "The Sierra Company Limited", ya que gracias a sus inacabadas trincheras, se han podido observar y trabajar sobre los restos más antiguos de la Humanidad en los yacimientos de Atapuerca.





Pero mi curso continúa y desde mi cauce he visto pasar a millones de peregrinos de todas las razas e idiomas, y les he acompañado hasta Olmos de Atapuerca, enseñándoles el camino a seguir a traves de mis árboles cuyas raices riego y de la música de mis pájaros, hasta enseñarles a lo lejos las agujas de la Catedral de Burgos, desde el Barrio burgalés de Cotar.